¿Cómo enseñar sobre el Holocausto?

Las Recomendaciones tienen como objetivo profundizar en el entendimiento del Holocausto planteando unas preguntas cruciales relacionadas con el contexto histórico del mismo, su alcance y magnitud y por qué y cómo ocurrió.

Descargue el documento completo de las Recomendaciones de la IHRA para la enseñanza y el aprendizaje sobre el Holocausto aquí

En primer lugar, los educadores pueden tener la certeza de que se puede enseñar el Holocausto de forma efectiva y satisfactoria a través de una preparación cuidadosa y unos materiales adecuados. La presente sección titulada ¿Cómo enseñar sobre el Holocausto? analiza las posibilidades y los retos de la enseñanza y el aprendizaje del Holocausto, presentando enfoques y métodos prácticos para aplicar en entornos educativos, tanto formales como informales.

Lea más sobre las Recomendaciones para la enseñanza y el aprendizaje sobre el Holocausto.

No existe una sola manera «correcta» de enseñar una materia, ni ninguna metodología ideal que sea apropiada para todos los educadores y alumnos. Las Recomendaciones que aquí se ofrecen, sin embargo, basadas en experiencias prácticas pueden resultar útiles para los profesores y otros educadores a la hora de elaborar sus propios planes de trabajo, teniendo en cuenta las necesidades individuales.

Lea otros extractos de las Recomendaciones aquí:  

 

Hands putting up a poster, Holocaust education
Photo by Luis Paredes.

 

3.1 PRINCIPIOS GENERALES

3.1.1 El Holocausto puede ser enseñado con éxito; no hay que tener miedo a abordarlo

Algunos profesores son reacios a abordar la historia del Holocausto debido a las dificultades y sensibilidad que perciben a la hora de enseñar la temática. Algunos se preguntan cómo transmitir la magnitud de la tragedia, la inmensidad de las cifras relacionadas, y las profundidades en las que la humanidad puede hundirse. Se preguntan cómo concientizar a los alumnos sin traumatizarlos o se preocupan por las posibles reacciones a la materia. En particular, los educadores querrán estar preparados para enfrentarse a comportamientos y reacciones que pueden ser provocadas por la intensidad del contenido.

Pueden ser acercados a la historia del Holocausto alumnos de distintos niveles educativos siempre y cuando el método sea apropiado a sus edades. Centrar el enfoque en historias personales de las víctimas, la huida y el salvamento es lo más apropiado para una audiencia más joven. Los alumnos mayores pueden ser animados a estudiar sobre el Holocausto a través de un material más complejo y exigente con mayor uso de fuentes primarias. Es importante seleccionar las fuentes y libros de texto según estas recomendaciones y con sensibilidad hacia las necesidades emocionales y circunstancias particulares del alumnado.

En general, no debe temerse abordar esta materia. Aunque pueda parecer abrumador, la experiencia muestra que el Holocausto puede enseñarse con éxito y con resultados positivos. Investigar y utilizar la amplia oferta de materiales que detallan métodos, mejores prácticas y estrategias específicas de enseñanza que pueden ser utilizados para apoyar la planificación, el diseño y la realización de las clases.

 

3.1.2 Sea preciso en el uso del lenguaje y defina el término Holocausto

  • La precisión del lenguaje cuando describimos términos y hechos puede ayudar al estudiante a evitar generalizaciones que promuevan la distorsión. Por ejemplo, el término «campo» es utilizado para describir un amplio abanico de sitios y lugares. Aunque murieron y fueron asesinadas muchas personas en los campos creados por los nazis y sus colaboradores, no todos los campos fueron expresamente construidos como centros de exterminio o campos de la muerte. Diferentes campos funcionaban de distintas maneras en diferentes momentos. Había campos de concentración, campos de trabajo forzado y campos de tránsito, por citar algunos. Definiciones precisas aportan especificidad y ayudan a evitar malentendidos.
  • Utilizar una clara definición del término «Holocausto» (o «Shoah») ayuda a minimizar confusiones desde el principio. IHRA utiliza el término «Holocausto» para describir la persecución sistemática y el asesinato de los judíos propiciado por el Estado de la Alemania nazi y sus colaboradores entre 1933 y 1945. La culminación de la persecución y del asesinato ocurrió en el contexto de la Segunda Guerra Mundial. Algunas organizaciones – incluso algunas instituciones de prestigio – utilizan el término «Holocausto» en un sentido muy amplio con el fin de englobar a t odas las víctimas del nazismo. Sin embargo, muchos historiadores utilizan una definición más precisa que reconoce que los judíos eran el objetivo de la persecución sistemática y el asesinato de tal manera que aparta su destino del de otros, con la posible excepción del pueblo gitano (ambos grupos de víctimas en los que se incluían tanto a niños como a personas mayores para su exterminio). Sea consciente de las distintas maneras en que las diversas fuentes conciben y aplican el término «Holocausto» o «Shoah». Asegúrese de que el uso de los términos es consistente y preciso.
  • Advierta a los estudiantes de que para mucha gente el término «Holocausto» es problemático. Siendo un término compuesto de dos palabras griegas, el «Holocausto» sugiere la ofrenda de un sacrificio crematorio y podría erróneamente parecer que implica que el asesinato masivo de los judíos fue una forma de martirio, y no el resultado de un genocidio. Por esta razón muchas personas prefieren utilizar la palabra del hebreo «Shoah» que significa «catástrofe».
  • Proporcione a los estudiantes la posibilidad de discutir de manera crítica la terminología. Haga explicito, por ejemplo, que términos como la «Solución Final» o el «Problema Judío» eran eufemismos creados y utilizados por los perpetradores en ese momento histórico para articular su visión del mundo contraria al lenguaje neutral existente para describir de manera imparcial acontecimientos pasados. Asimismo, términos como «gueto» deben ser desmitificados para revelar los diferentes significados utilizados por los nazis frente a su uso antes y después del nazismo.
  • Se anima a los educadores a tener en cuenta las maneras en las que la sociedad y la cultura hablan sobre el Holocausto ya que esas nociones sociales pueden influenciar la comprensión de los estudiantes. La cultura y el discurso popular pueden perpetuar mitos y conceptos erróneos sobre la historia. El desarrollo de consistencia, exactitud y precisión del lenguaje ayudan a deconstruir nociones preconcebidas.

 

3.1.3 Dar cobertura amplia a la materia y contextualizar la historia

El Holocausto fue una sucesión de acontecimientos entrelazados que ocurrieron transcendiendo fronteras nacionales a lo largo del tiempo en el contexto de la guerra. De este modo, los sucesos continúan siendo parte de diferentes historias y procesos históricos de Europa y del mundo. Los estudiantes deberían ser capaces de reconocer que el Holocausto fue llevado a cabo de distinta manera en cada país. Además, el genocidio fue posible a raíz de varios factores a corto, medio y largo plazo en la historia europea y global. Intente crear oportunidades para comprender estos factores considerando contextos más amplios en los cuales ocurrieron los acontecimientos que dieron lugar al Holocausto.

Estas dimensiones han sido investigadas ampliamente por los académicos. Experimente y haga uso de los estudios críticos y académicos recientes que abarcan distintos aspectos del genocidio y su evolución a la hora de diseñar planes de trabajo y sesiones individuales.